Una peruana en Polonia. La presencia de imágenes de Santa Rosa. ..
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frontispicio encontramos la imagen de la santa, conocida ya de la versión ante-
rior aunque algo simplificada.
[Fig. 2. El frontispicio de L. Hansen, Roza Indyiska (...), Cracovia, 1677]
Su retrato, inscrito de modo similar en una estilizada flor de rosa, es una
imagen especular de la de su versión del año 1666. A los lados del rosal ya no
se nos presentan las figuras indígenas; desaparece también el escudo Dąbrowa,
sustituido por un óvalo con la imagen de San Jacinto de Cracovia sosteniendo
en su mano izquierda una custodia, y en la derecha una figura de la Virgen con
el Niño - como recordamos, según la leyenda San Jacinto salvó tanto la Hos-
tia como la figura de la iglesia en la ciudad de Kiev cuando ésta fue asediada en
1241 por los tártaros -.
Se puede tratar la hagiografía hecha por Hansen como una pauta para re-
construir las formas que tomaba el culto de Santa Rosa también en Polonia.
Desde este punto de vista al historiador del arte que adopta la perspectiva an-
tropológica le parecerá interesante el capítulo VI “Sobre las estampas de San-
ta Rosa, que por ellas Dios a muchos enfermos de diversas enfermedades curó”
(“O obrazkach S. Rozy, jako przez nie Bóg wiele chorych na rozne choroby uz-
drawiał”). En más de diez descripciones de las curaciones milagrosas de gen-
te de condición diversa se repite el motivo de una imagen de Isabel Flores de
Oliva, en la mayoría de los casos un estampado, aplicado al cuerpo. El contacto
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frontispicio encontramos la imagen de la santa, conocida ya de la versión ante-
rior aunque algo simplificada.
[Fig. 2. El frontispicio de L. Hansen, Roza Indyiska (...), Cracovia, 1677]
Su retrato, inscrito de modo similar en una estilizada flor de rosa, es una
imagen especular de la de su versión del año 1666. A los lados del rosal ya no
se nos presentan las figuras indígenas; desaparece también el escudo Dąbrowa,
sustituido por un óvalo con la imagen de San Jacinto de Cracovia sosteniendo
en su mano izquierda una custodia, y en la derecha una figura de la Virgen con
el Niño - como recordamos, según la leyenda San Jacinto salvó tanto la Hos-
tia como la figura de la iglesia en la ciudad de Kiev cuando ésta fue asediada en
1241 por los tártaros -.
Se puede tratar la hagiografía hecha por Hansen como una pauta para re-
construir las formas que tomaba el culto de Santa Rosa también en Polonia.
Desde este punto de vista al historiador del arte que adopta la perspectiva an-
tropológica le parecerá interesante el capítulo VI “Sobre las estampas de San-
ta Rosa, que por ellas Dios a muchos enfermos de diversas enfermedades curó”
(“O obrazkach S. Rozy, jako przez nie Bóg wiele chorych na rozne choroby uz-
drawiał”). En más de diez descripciones de las curaciones milagrosas de gen-
te de condición diversa se repite el motivo de una imagen de Isabel Flores de
Oliva, en la mayoría de los casos un estampado, aplicado al cuerpo. El contacto