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Serrano Arias, Ulises Sebastián; Gaytán Villalpando, Beatriz Adriana: El murciélago se hizo eterno entre colores y piedras preciosas
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Ulises Sebastián Serrano Arias, Beatriz Adriana Gaytán Villalpando
[Fig. 14. Representación del excremento divino (Códice Borgia).]
En una representación pictográfica más, el Códice Borgia61 según Eduard
Seler muestra al murciélago como la deidad dadora de la vida [fig. 15]. En la
lámina 44 muestra al quiróptero entregando a la diosa Xochiquetzal, un cora-
zón humano, símbolo de la vida que el mismo Seler inteipreta como entregar la
vida, asignándoles al murciélago el titulo de Dador de la Vida.
Más adelante Seler continúa con la inteipretación y se le asigna otro título,
“el animal que despedaza y desgarra, que arranca cabezas”. El mamífero ala-
do es considerado una de las deidades animales abundantes en el panteón me-
soamericano e incluso ha sido considerado como un nahual que se alimenta de
sangre.68 Es precisamente en las láminas 49, 50 y 51 donde se contempla la re-
presentación del dios murciélago, en tonalidades verdes, es decir, oscuras, cu-
riosamente muy parecidas a las representaciones del Códice Fejérváry-Mayer.
Seler ha interpretado el color verde de las representaciones del quiróptero como
“oscuro”, lo que se ha representado como el inframundo, el lugar de la oscuri-
dad, ya que no solo en este códice se le representa con estos colores. También
se suman los atavíos que porta en clara referencia con las deidades de la muerte
y el autosacrificio. El mismo antropólogo-etnohistoriador clasificó a los anima-
les de estrecha relación con el inframundo y los catalogó como destrozadores.
67 El Códice Borgia ó Yoalli Ehecatl -Noche/Viento- es un manuscrito mesoamericano de
contenido ritual y adivinatorio, originario del suroeste del estado de Puebla. El Códice Borgia
forma parte del Grupo Borgia, al que da nombre, está escrito sobre piel de venado en 39 hojas
de 27 cm por 27 cm, con una longitud total de 11 metros. Todas las páginas menos la última es-
tán escritas e ilustradas por ambas caras, lo que supone 76 páginas con contenido. El códice se
lee de derecha a izquierda. Actualmente se encuentra en la Biblioteca Apostólica Vaticana (Ca-
rrasco 2001: 94-118).
68 Espejo 1994: 334.
Ulises Sebastián Serrano Arias, Beatriz Adriana Gaytán Villalpando
[Fig. 14. Representación del excremento divino (Códice Borgia).]
En una representación pictográfica más, el Códice Borgia61 según Eduard
Seler muestra al murciélago como la deidad dadora de la vida [fig. 15]. En la
lámina 44 muestra al quiróptero entregando a la diosa Xochiquetzal, un cora-
zón humano, símbolo de la vida que el mismo Seler inteipreta como entregar la
vida, asignándoles al murciélago el titulo de Dador de la Vida.
Más adelante Seler continúa con la inteipretación y se le asigna otro título,
“el animal que despedaza y desgarra, que arranca cabezas”. El mamífero ala-
do es considerado una de las deidades animales abundantes en el panteón me-
soamericano e incluso ha sido considerado como un nahual que se alimenta de
sangre.68 Es precisamente en las láminas 49, 50 y 51 donde se contempla la re-
presentación del dios murciélago, en tonalidades verdes, es decir, oscuras, cu-
riosamente muy parecidas a las representaciones del Códice Fejérváry-Mayer.
Seler ha interpretado el color verde de las representaciones del quiróptero como
“oscuro”, lo que se ha representado como el inframundo, el lugar de la oscuri-
dad, ya que no solo en este códice se le representa con estos colores. También
se suman los atavíos que porta en clara referencia con las deidades de la muerte
y el autosacrificio. El mismo antropólogo-etnohistoriador clasificó a los anima-
les de estrecha relación con el inframundo y los catalogó como destrozadores.
67 El Códice Borgia ó Yoalli Ehecatl -Noche/Viento- es un manuscrito mesoamericano de
contenido ritual y adivinatorio, originario del suroeste del estado de Puebla. El Códice Borgia
forma parte del Grupo Borgia, al que da nombre, está escrito sobre piel de venado en 39 hojas
de 27 cm por 27 cm, con una longitud total de 11 metros. Todas las páginas menos la última es-
tán escritas e ilustradas por ambas caras, lo que supone 76 páginas con contenido. El códice se
lee de derecha a izquierda. Actualmente se encuentra en la Biblioteca Apostólica Vaticana (Ca-
rrasco 2001: 94-118).
68 Espejo 1994: 334.