Técnica local e influjo mudejar en cubiertas eclesiásticas
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uno de los extremos y una perforación vertical para encajar una clavija tronco-
cónica que cierra el enlace.
La cubierta se acompañaba de un techo de vigas sobre arrastres transver-
sales; pero, en la arquitectura religiosa con grandes naves de templos, se combi-
nó con otros elementos para fortalecer su condición estructural y también cum-
plir una misión ornamental. Estas grandes obras agregaron elementos como:
zapatas en saledizo y gualdras de amarre para solventar las solicitaciones es-
tructurales, elementos que fueron comunes en el área, como resultado de una
posible interpretación local que posibilitó la fabricación de cubiertas que libra-
ron espacios hasta de 12 metros de luz interior.
Resuelta la forma de cubrir las naves, faltaba solucionar la expresividad
volumétrica y decorativa de las cubiertas en su parte interior. Las aportaciones
locales tuvieron su mayor participación al interpretar y resolver los techos in-
teriores, a través de plafones de vigas sobre zapatas horizontales, bóvedas de
nervaduras de cerchones curvas y trapezoidales, cuyas formas están ligadas
a las expresiones mudejares.
Tres expresiones con influjo mudejar y solución local
Sistemas de techumbres interiores en las grandes naves
La abundancia de madera, la habilidad para trabajarla y pintarla y la ur-
gente necesidad de espacios para el desarrollo del culto, posibilitó la erección
de grandes obras y:
.. .surgió esta arquitectura con cubiertas de madera, algunas de las cuales
han subsistido hasta nuestros días. Dichas cubiertas adoptan a veces la
forma de artesonado y otras tanto la de bóveda de cañón corrido como
de techumbre plana. Sin embargo, a través del tiempo y de las diferentes
formas, tienen algo en común. Cada una de ellas presenta a su manera,
una forma de ver el cielo y en conjunto, una tradición artística regional15.
Las techumbres interiores de los templos fueron resueltas de manera in-
dependiente a las cubiertas de tijera. “No existe propiamente en Michoacán la
armadura que funja a la vez como elemento de carga y decorativo como en el
caso de las obras mudejares”16. Están ancladas a un espacio intermedio, deno-
minado en su término regional como -tapanco- formado por la separación de
la cubierta de vertientes y la techumbre interior. Se identifican tres expresiones
con influjo mudejar y soluciones provenientes de interpretaciones locales liga-
15 Nelly 1998: 270.
16 Álvarez Rodríguez 2001: 60.
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uno de los extremos y una perforación vertical para encajar una clavija tronco-
cónica que cierra el enlace.
La cubierta se acompañaba de un techo de vigas sobre arrastres transver-
sales; pero, en la arquitectura religiosa con grandes naves de templos, se combi-
nó con otros elementos para fortalecer su condición estructural y también cum-
plir una misión ornamental. Estas grandes obras agregaron elementos como:
zapatas en saledizo y gualdras de amarre para solventar las solicitaciones es-
tructurales, elementos que fueron comunes en el área, como resultado de una
posible interpretación local que posibilitó la fabricación de cubiertas que libra-
ron espacios hasta de 12 metros de luz interior.
Resuelta la forma de cubrir las naves, faltaba solucionar la expresividad
volumétrica y decorativa de las cubiertas en su parte interior. Las aportaciones
locales tuvieron su mayor participación al interpretar y resolver los techos in-
teriores, a través de plafones de vigas sobre zapatas horizontales, bóvedas de
nervaduras de cerchones curvas y trapezoidales, cuyas formas están ligadas
a las expresiones mudejares.
Tres expresiones con influjo mudejar y solución local
Sistemas de techumbres interiores en las grandes naves
La abundancia de madera, la habilidad para trabajarla y pintarla y la ur-
gente necesidad de espacios para el desarrollo del culto, posibilitó la erección
de grandes obras y:
.. .surgió esta arquitectura con cubiertas de madera, algunas de las cuales
han subsistido hasta nuestros días. Dichas cubiertas adoptan a veces la
forma de artesonado y otras tanto la de bóveda de cañón corrido como
de techumbre plana. Sin embargo, a través del tiempo y de las diferentes
formas, tienen algo en común. Cada una de ellas presenta a su manera,
una forma de ver el cielo y en conjunto, una tradición artística regional15.
Las techumbres interiores de los templos fueron resueltas de manera in-
dependiente a las cubiertas de tijera. “No existe propiamente en Michoacán la
armadura que funja a la vez como elemento de carga y decorativo como en el
caso de las obras mudejares”16. Están ancladas a un espacio intermedio, deno-
minado en su término regional como -tapanco- formado por la separación de
la cubierta de vertientes y la techumbre interior. Se identifican tres expresiones
con influjo mudejar y soluciones provenientes de interpretaciones locales liga-
15 Nelly 1998: 270.
16 Álvarez Rodríguez 2001: 60.