La anunciadora azul de la muerte
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por el Perú y llegando hasta Bolivia.6 7 Aparece desde hace siglos o quizás in-
cluso desde hace milenios en el área de las creencias relacionadas con la muer-
te y en él de los ritos funerarios formalizados. Queda hasta hoy tema y objeto
de referencias simbólicas en las canciones de luto muy antiguas que las muje-
res cantan juntas mientras velan por el difunto. La melodía de esas canciones
contiene rasgos onomatopéyicos imitando el zumbido de la chiririnka.1 Lo que
atrae la atención es que la presencia de esta mosca va más allá del ámbito de
la cultura relacionado directamente con la muerte. La encontramos igualmen-
te en el folclore verbal en situaciones ajenas a las mortuorias sensu stricto - y,
en particularidad, aparece en forma de muchos éxitos de la música popular pe-
ruana, las canciones llamadas huayno. Estas se cantan tanto en lengua quechua
como en español, con frecuencia cobrando mucha popularidad y formando par-
te del repertorio de cantantes y grupos musicales conocidos y apreciados.8 El
sentimiento que transmiten es particular, expresivo, aunque no desprovisto de
aspecto reflexivo, lejano a la sordidez de las canciones de luto europeas, cons-
tituyendo una imagen ilustrativa de las relaciones entre lo vital y la muerte tan
diferentes en su percepción en ambas culturas.
Las investigaciones detalladas de fuentes etnográficas nos traen más sor-
presas todavía, haciendo ampliar el ámbito de la presencia de la chiririnka en
el marco de la cultura tradicional de los Andes. Es aquí pues donde aparecen
numerosas indicaciones que prueban la existencia de otra “incorporación” muy
aparente de este insecto más - a saber, aparece como una encarnación del
alma humana. El papel animístico de la chiririnka a la par con su función pro-
fética de la anunciadora de la muerte va definiendo su figura como la de un in-
secto que tiene relaciones muy profundamente arraigadas y que vienen de muy
antaño con la esfera de las creencias y las prácticas funerarias y, más amplia-
mente, con la de la escatología andina. Ambas “enamaciones” suyas componen
una cualidad complementaria que, en situaciones concretas, desvela su lado
profético o animístico o bien, alternativamente, aparece jugando estos dos pa-
peles al mismo tiempo.
6 Este ámbito, dado en forma aproximada, abarca los terrenos de donde provienen los tex-
tos-fuente sobre la chiririnka conocidos a los autores del presente (teniendo en algunas zonas
otros nombres locales). Parece probable, sin embargo, que el complejo de creencias similares re-
lacionadas con esta mosca como augurio de la muerte aparezca al igual en otras zonas de la Amé-
rica del Sur.
7 Huamán 2004: 253.
8 He aquí dos ejemplos populares y representativos de canciones peruanas contemporáneas
sobre la chiririnka, provenientes de la región de Huancavelica: https://www.youtube.com/wat-
ch?v=5usZ-c2bdO8 y otra de Ayacucho: https://www.youtube.com/watch?v=708UAZjkR34 (el
23 de septiembre de 2019).
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por el Perú y llegando hasta Bolivia.6 7 Aparece desde hace siglos o quizás in-
cluso desde hace milenios en el área de las creencias relacionadas con la muer-
te y en él de los ritos funerarios formalizados. Queda hasta hoy tema y objeto
de referencias simbólicas en las canciones de luto muy antiguas que las muje-
res cantan juntas mientras velan por el difunto. La melodía de esas canciones
contiene rasgos onomatopéyicos imitando el zumbido de la chiririnka.1 Lo que
atrae la atención es que la presencia de esta mosca va más allá del ámbito de
la cultura relacionado directamente con la muerte. La encontramos igualmen-
te en el folclore verbal en situaciones ajenas a las mortuorias sensu stricto - y,
en particularidad, aparece en forma de muchos éxitos de la música popular pe-
ruana, las canciones llamadas huayno. Estas se cantan tanto en lengua quechua
como en español, con frecuencia cobrando mucha popularidad y formando par-
te del repertorio de cantantes y grupos musicales conocidos y apreciados.8 El
sentimiento que transmiten es particular, expresivo, aunque no desprovisto de
aspecto reflexivo, lejano a la sordidez de las canciones de luto europeas, cons-
tituyendo una imagen ilustrativa de las relaciones entre lo vital y la muerte tan
diferentes en su percepción en ambas culturas.
Las investigaciones detalladas de fuentes etnográficas nos traen más sor-
presas todavía, haciendo ampliar el ámbito de la presencia de la chiririnka en
el marco de la cultura tradicional de los Andes. Es aquí pues donde aparecen
numerosas indicaciones que prueban la existencia de otra “incorporación” muy
aparente de este insecto más - a saber, aparece como una encarnación del
alma humana. El papel animístico de la chiririnka a la par con su función pro-
fética de la anunciadora de la muerte va definiendo su figura como la de un in-
secto que tiene relaciones muy profundamente arraigadas y que vienen de muy
antaño con la esfera de las creencias y las prácticas funerarias y, más amplia-
mente, con la de la escatología andina. Ambas “enamaciones” suyas componen
una cualidad complementaria que, en situaciones concretas, desvela su lado
profético o animístico o bien, alternativamente, aparece jugando estos dos pa-
peles al mismo tiempo.
6 Este ámbito, dado en forma aproximada, abarca los terrenos de donde provienen los tex-
tos-fuente sobre la chiririnka conocidos a los autores del presente (teniendo en algunas zonas
otros nombres locales). Parece probable, sin embargo, que el complejo de creencias similares re-
lacionadas con esta mosca como augurio de la muerte aparezca al igual en otras zonas de la Amé-
rica del Sur.
7 Huamán 2004: 253.
8 He aquí dos ejemplos populares y representativos de canciones peruanas contemporáneas
sobre la chiririnka, provenientes de la región de Huancavelica: https://www.youtube.com/wat-
ch?v=5usZ-c2bdO8 y otra de Ayacucho: https://www.youtube.com/watch?v=708UAZjkR34 (el
23 de septiembre de 2019).