JORNADA SEGUNDA. 321
Alcalde. De la agua vertida dicen: 765
No toda cogida. Vamos.
Sargento. Mirad que soy el Sargento.
Alcalde. Pues yo haré en alboreando
Que convirtáis la alabarda
En una albarda.
Bartolo. Burláos. 770
Jornada segunda.
(Salen JUAN SERRANO y el ESCRIBANO.)
Serrano. No lia tenido el lugar mejor alcalde;
Que esto tenia escondido Pedro Crespo.
Escribano. Cuatro causas
De hijos de vecino ha sentenciado
Esta semana.
Serrano. ¿En qué por vuestra vida? 5
Escribano. Piadosamente ha sido: desterrados
Van por dos años con que al Rey le sirvan
En aquesta jornada á que se apresta
Para ir á Portugal; muchos sin ellos
Van aseutando plazas cada dia 1G
De miedo del alcalde.
Serrano. Así conviene
Que en poco deje limpia á Zalamea
De holgazanes. Pero ya ha salido,
Que es hora de juzgado, y solo temo
Que quiera perseguir á los soldados 15
Con tanto extremo; plegué á Dios que sea
El agua limpia, y mas este Sargento
No sé en qué ha de parar; los Capitanes
Sospecho que andan medio amotinados.
Escribano. Dios lo ha de remediar; aun bien que es otro 20
El escribano de la causa.
765 f. „Del agua vertida, al-
guna cogida. En que se advierte,
que cuando no se pudiere recobrar
enteramente lo perdido, se pro-
Calderon, Der Richter von Zalamea.
cure recoger la parte que fuere
posible" {Refr. 1, 27). — Ueber
de la statt del siehe zu Ale.
I, 300 f.
21
Alcalde. De la agua vertida dicen: 765
No toda cogida. Vamos.
Sargento. Mirad que soy el Sargento.
Alcalde. Pues yo haré en alboreando
Que convirtáis la alabarda
En una albarda.
Bartolo. Burláos. 770
Jornada segunda.
(Salen JUAN SERRANO y el ESCRIBANO.)
Serrano. No lia tenido el lugar mejor alcalde;
Que esto tenia escondido Pedro Crespo.
Escribano. Cuatro causas
De hijos de vecino ha sentenciado
Esta semana.
Serrano. ¿En qué por vuestra vida? 5
Escribano. Piadosamente ha sido: desterrados
Van por dos años con que al Rey le sirvan
En aquesta jornada á que se apresta
Para ir á Portugal; muchos sin ellos
Van aseutando plazas cada dia 1G
De miedo del alcalde.
Serrano. Así conviene
Que en poco deje limpia á Zalamea
De holgazanes. Pero ya ha salido,
Que es hora de juzgado, y solo temo
Que quiera perseguir á los soldados 15
Con tanto extremo; plegué á Dios que sea
El agua limpia, y mas este Sargento
No sé en qué ha de parar; los Capitanes
Sospecho que andan medio amotinados.
Escribano. Dios lo ha de remediar; aun bien que es otro 20
El escribano de la causa.
765 f. „Del agua vertida, al-
guna cogida. En que se advierte,
que cuando no se pudiere recobrar
enteramente lo perdido, se pro-
Calderon, Der Richter von Zalamea.
cure recoger la parte que fuere
posible" {Refr. 1, 27). — Ueber
de la statt del siehe zu Ale.
I, 300 f.
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