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https://doi.org/10.11588/diglit.67618#0316
312
GEORG LEHNERT
Capítulo XX
Tejidos y trabajos en cuero
En el Renacimiento, el arte de tejer sedas pasa de
la alta Italia a Lyon. En Francia utilizan los mismos
modelos que en la alta Italia, de manera que en muchos
casos no es posible dilucidar si un tejido estilo Renaci-
miento se ejecutó en Italia o en Lyon. En Alemania
y los Países Rajos se tejía casi siempre en lana sencillos
dibujos, derivados de los modelos trabajados en seda.
La estampación de telas sólo desempeña un papel im-
portante después de la guerra de los Treinta Años ;
antes se utilizaba principalmente para imitar los mo-
delos tejidos, especialmente el de granadas, así como
para los modelos de bordados (fig. 118). Por el con-
trario, sobre lino se imprimía ya entonces en colores ma-
tizados, para confeccionar pequeños tapetes o colchas.
El tejido de gobelinos experimenta notable des-
arrollo. En esa técnica Rruselas sobrepuja a Arras. Allí
aparecen famosos talleres como los de Pedro Panne-
maker, Pieter van Aels y otros. En los tapices murales
se reproducen con frecuencia grandes escenas de figuras
que están tomadas de la Riblia, de la Flistoria universal
antigua y contemporánea o de la Mitología de la Anti-
güedad. Además desempeñan un papel importante las
alegorías. Más tarde se generalizan los « follajes », que
reproducen paisajes selváticos, animados con animales
y casi siempre con un gran fondo de profusa vegetación,
GEORG LEHNERT
Capítulo XX
Tejidos y trabajos en cuero
En el Renacimiento, el arte de tejer sedas pasa de
la alta Italia a Lyon. En Francia utilizan los mismos
modelos que en la alta Italia, de manera que en muchos
casos no es posible dilucidar si un tejido estilo Renaci-
miento se ejecutó en Italia o en Lyon. En Alemania
y los Países Rajos se tejía casi siempre en lana sencillos
dibujos, derivados de los modelos trabajados en seda.
La estampación de telas sólo desempeña un papel im-
portante después de la guerra de los Treinta Años ;
antes se utilizaba principalmente para imitar los mo-
delos tejidos, especialmente el de granadas, así como
para los modelos de bordados (fig. 118). Por el con-
trario, sobre lino se imprimía ya entonces en colores ma-
tizados, para confeccionar pequeños tapetes o colchas.
El tejido de gobelinos experimenta notable des-
arrollo. En esa técnica Rruselas sobrepuja a Arras. Allí
aparecen famosos talleres como los de Pedro Panne-
maker, Pieter van Aels y otros. En los tapices murales
se reproducen con frecuencia grandes escenas de figuras
que están tomadas de la Riblia, de la Flistoria universal
antigua y contemporánea o de la Mitología de la Anti-
güedad. Además desempeñan un papel importante las
alegorías. Más tarde se generalizan los « follajes », que
reproducen paisajes selváticos, animados con animales
y casi siempre con un gran fondo de profusa vegetación,