Overview
Universitätsbibliothek HeidelbergUniversitätsbibliothek Heidelberg
Metadaten

Busch, Werner [Hrsg.]; Freie Universität Berlin / Kunsthistorisches Institut [Mitarb.]
Geschichte der klassischen Bildgattungen in Quellentexten und Kommentaren: eine Buchreihe (Band 3): Landschaftsmalerei — Berlin: Reimer, 1997

DOI Kapitel:
19. Francisco Pacheco
DOI Seite / Zitierlink:
https://doi.org/10.11588/diglit.65784#0126

DWork-Logo
Überblick
Faksimile
0.5
1 cm
facsimile
Vollansicht
OCR-Volltext
19. Francisco Pacheco
El Arte de la Pintura (1649)
Cosa muy usada es en este tiempo, con cuya parte se han contentado muchos, el
exercicio de pintar paises, a que los flamencos, especialmente, han sido muy
inclinados, usdndolos a temple y olio por la disposicion de su cielo de sus provincias,
campos, jardines y rios. Y entre los muchos que lo han exercitado ha sido muy
celebrado Paulo Bril, varon de mucha invencion y caudal y alegre colorido. Ynoha
carecido Italia desta gloria, pues tuvo a Jeronimo Muciano, cuya manera, segun el
sentimiento comun, fue la mds grande en hacer paises; y la siguid, diestramente,
Cesar de Arbasia, de quien lo tomo Antonio Mohedano y esparte en la pintura que
no se debe despreciar.
El orden que se tiene para pintar un pais, estando el lienzo dispuesto, es debuxarlo,
repartiendolo en tres, o cuatro, distancias, o suelos: en elprimero, donde se pone la
figura o Santo, se hacen los drboles ypenas mayores, teniendo respeto a laproporcion
de la figura; en el segundo se hacen los drboles y casas menores, y en el tercero,
mucho menos, y en el cuarto, donde se juntan las sierras con el cielo, se remata en
mayor diminucion. Al debuxo se sigue el bosquexo, o metido de colores que, algunos
suelen hacer de blanco y negro, aunque tengo por mejorpintarlo de la primera vez,
porque el esmalte queda mds alegre; y, templando la cantidad que es menester, y
antes mds, con el aceite de linaza, o de nueces, poniendo bastante blanco, se hard
una templa alegre, no oscura, antes se incline mds a clara, porque el tiempo lo
oscurece, y desta templa mayor se sacardn con el blanco otras dos claras; pero una
mds que otra, de suerte que se vengan a diferenciar. Luego, con carmin y blanco, se
hard una templa de rosado, mds claro que las del azul; y, si se pretende que sea
puesta o salida de sol, se podrd hacer una templa mds clara que las que habemos
dicho con blanco y ocre. Y estando templados los colores se ird repartiendo asi: en
el horizonte arrimado a las sierras, la templa de ocre y blanco; y, de alli hacia
arriba, se arrimard a esta templa la del rosado otra tanta cantidad, poco mds o
menos; tras desta se seguirdn las de azul, rematando lo mds alto con lo mds oscuro
advirtiendo que todas se han de unir unas con otras, dexdndolas con grande suavidad.
En este cielo podrd habernubes alegres, afiadiendo a la templa del esmalte un poco
de carmin y a otras un poco de negro, ddndole sus luces del mesmo rosado y, a
partes, con el blanco y ocre; y serd donde niiran al horizonte, como lus participada
del. Hecho el cielo, que es el medio lienzo de arriba, se sigue hacer la tierra
comenzando desde las sierras que se juntan con el, las cuales se hardn con la templa
mds clara del esmalte y blanco, que viene a ser algo mds oscura que el horizonte,
porque la tierra es siempre mds oscura que el Cielo, mayormente, estando el sol en
aquella parte. Estas sierras, tendrdn su claro y oscuro, porque en lo baxo se suelen
formar despues, al acabado, ciudades o drboles pequenos. Tras desta, se sigue,

124
 
Annotationen